“Candidiasis y verano” parecen dos conceptos tan unidos como “sol y playa”. Si eres de las que llega el verano y casualmente también vuelven los picores, los flujos vaginales extraños, esas micciones dolorosas… No te preocupes, no es solo una impresión tuya. El verano trae consigo muchas de las actividades preferidas de los hongos y las infecciones. Si tienes candidiasis en verano, este post es para ti.
La candidiasis vaginal es tan común que afectará a un 75% de las mujeres en algún momento de su vida. De hecho, también es habitual desarrollar un segundo episodio y un 5% tendrán más de 4 candidiasis vaginales en su vida, según la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO).
Aunque la candidiasis es muy común entre las mujeres a nivel general, hay muchos factores que favorecen su aparición en la época estival. La candidiasis en verano es muy frecuente debido al calor y a la humedad de los bikinis y bañadores, que crean un clima perfecto para que la Cándida Albicans empiece a reproducirse de forma descontrolada y de paso a la infección vaginal.
¿Qué es la candidiasis?
La candidiasis vaginal es una infección provocada por el hongo “Cándida”, en la mayoría de casos generado específicamente por la Cándida Albicans. Habitualmente, es un hongo que ya está presente en la flora intestinal y vaginal. El problema surge cuando este hongo se reproduce de forma acelerada por cambios en el pH vaginal, variaciones hormonales, cambios en la flora bacteriana y/o disminución del sistema inmune.
También se puede transmitir con relaciones sexuales sin preservativo, pero no se considera una Enfermedad de Transmisión Sexual, ya que puedes tener candidiasis sin necesidad de haber tenido relaciones sexuales.
Descubre todo lo que necesitas saber sobre la candidiasis en este post.
Síntomas
Los síntomas más frecuentes de la candidiasis vaginal en verano son:
- Picor vaginal
- Ardor o dolor que aumenta en la micción y/o las relaciones sexuales
- Flujo anormal: suele ser de un color blanquecino tirando a grisáceo, acuoso o más espeso al habitual. El flujo provocado por la candidiasis suele ser también más abundante.
- Enrojecimiento e inflamación en la zona de la vulva
- Pruritos en la zona de la vulva y vagina
Además, los síntomas suelen “ir a peor” los días previos a la menstruación, lo que puede ser una señal clave para sospechar. No hace falta que tengas todos los síntomas para tener candidiasis vaginal, por lo que ante la duda lo mejor es que acudas a tu ginecólogo/a.
¿Por qué es más frecuente la candidiasis vaginal en verano?
La candidiasis vaginal en verano es tan frecuente principalmente por 4 razones principales:
- La humedad
Te pones el bikini/bañador y pasas horas y horas mojada, ¿te suena? En verano es normal que tengamos un exceso de humedad en la zona íntima y ese es el principal motivo por el que aparecen las candidiasis en verano.
La humedad es el clima preferido para los hongos: les permite desarrollarse y seguir reproduciéndose. Los hongos no son “malos”: tenemos un mini-ecosistema de hongos y bacterias en la vulva y en la vagina que cumplen su función y nos protegen de otras infecciones. El problema surge cuando ese ecosistema se desequilibra y empiezan a reproducirse sin control.
- El calor
En verano también sudamos mucho, por lo que si no nos cambiamos de ropa interior de manera frecuente, también facilitamos el ambiente húmedo preferido de los hongos. Para evitar la candidiasis vaginal en verano te recomiendo que utilices ropa interior de algodón orgánico, ya que es el material más transpirable.
- El cloro de las piscinas
Esto no significa que el cloro sea horrible y provoque “directamente” candidiasis vaginal. Lo que sucede es que el cloro y otras sustancias químicas que sirven para que la piscina esté limpia pueden alterar el pH vaginal. Este desequilibrio nos “desprotege” y ayuda a que tengamos más candidiasis en verano.
- Los tóxicos de los tampones o compresas desechables
Los tampones desechables tampoco provocan directamente las candidiasis vaginales. Pero sí que pueden ser un motivo más que ayude a crear un ecosistema propicio para las infecciones. Los tampones absorben todo: la mucosa vaginal (que sirve para protegernos) y el cloro de la piscina… Si has utilizado alguna vez un tampón para una pool party, sabes de lo que estoy hablando.
Además, recuerda que un mal uso de los tampones puede derivar en otros problemas como el SST, por eso es súper importante fijarse bien en las horas de utilización indicadas y cambiar cada poco tiempo.
Las compresas de tela, ¡más de lo mismo!: muchas contienen tóxicos que alteran el pH vaginal y multiplican las posibilidades de tener infecciones o candidiasis en verano.
¿Cómo evitar la candidiasis en verano?
Si quieres saber cómo evitar la candidiasis en verano y disfrutar tus vacaciones como mereces, ¡apunta!
Alimentación
Introduce en tu dieta alimentos que sean buenos para tu microbiota. Productos como el yogur, el kéfir, el pan de masa madre o el miso pueden ayudarte a prevenir la candidiasis en verano. El curso de “Salud Vulvovaginal” incluye una guía interesantísima con los alimentos clave para mantener tu vulva y vagina sanas frente a las infecciones, ¿lo conoces?
Utiliza productos higiénicos adecuados
Si tienes mucho flujo y eso te crea mucha humedad, no utilices compresas desechables que contengan tóxicos. Prueba con un protegeslip de tela de algodón 100% ecológico que retenga la humedad y cuide tu flora vaginal para evitar la candidiasis en verano.
Lleva un bikini/bañador de repuesto
Cuando vayas a la playa o la piscina, ¡lleva siempre otro bikini de repuesto! Así evitarás el ambiente húmedo que favorece la candidiasis en verano. También evita esos pantalones ajustados que te oprimen la vulva: prioriza las prendas holgadas y transpirables.
Higiene adecuada
La higiene también es un punto clave, especialmente en verano donde creemos que por el sudor olemos mal. Muchas veces caemos en la “trampa” de pensar que cuanto más jabón y productos utilicemos “más higiénicas” somos. Nada más lejos de la realidad: la vulva y la vagina deberían lavarse solo con agua o con productos adecuados para el pH vulvovaginal. La vulva y la vagina no huelen mal, huelen a lo que son… ¡Así que derriba el tabú! Evita los desodorantes y los perfumes genitales.
Vigila qué medicamentos utilizas
La medicación también favorece la candidiasis, así que observa qué tipo de medicación estás tomando y consulta con tu médico/a. Por ejemplo, los anticonceptivos hormonales de dosis altas de estrógenos, los antibióticos o los corticoesteroides, pueden desregular la flora vaginal y exponerte a la candidiasis.
¿Cómo tratar la candidiasis?
Para tratar la candidiasis en verano lo mejor es que acudas cuanto antes a tu ginecólgo/a. Deberá ser una cura específica para tu caso en particular, aunque ya te adelanto que es habitual que te receten óvulos vaginales y cremas antifúngicas, o tratamientos orales (cuando son infecciones más prolongadas en el tiempo).
¿Sólo las mujeres pueden tener candidiasis en verano?
No, los hombres también pueden tener candidiasis.
Aunque es más común en mujeres, la candidiasis masculina puede aparecer también en verano. Los hombres pueden padecer síntomas leves de infección por cándida en el pene por los mismos motivos que la candida en mujeres.
¡Ah! Y también hay etapas de la vida en los que es más común tener candidiasis vaginal. Aunque es normal la candidiasis en verano, también es muy frecuente en el embarazo (por los cambios hormonales que se producen) y en la menopausia (por la disminución de estrógenos y el cambio en el pH). Otras enfermedades como la diabetes o problemas relacionados con el sistema inmunológico debilitado también son factores que abren la puerta a la candidiasis vaginal u otras infecciones.
Otras infecciones vaginales típicas del verano
La vagina tiene un ambiente rico en nutrientes para los hongos. Si además le añades humedad constante, los hongos empiezan a crecer más y más, lo que provoca la candidiasis en verano.
Pero no solo a la candidiasis “le encanta” la humedad. También a las bacterias: por eso también es normal tener otro tipo de infecciones vulvovaginales en verano. Un caso de ellos es la cistitis en verano, que se produce por una infección de bacterias que acceden de la uretra hasta la vejiga. Lo normal es que nuestro flujo vaginal logre acabar con esas bacterias que provocan la cistitis, pero si nuestro pH está debilitado (por el cloro, tóxicos, un ambiente muy húmedo…) no puede “luchar” contra esas bacterias y se produce la infección.
Si quieres descubrir cómo evitar la candidiasis en verano y mejorar tu salud vulvovaginal te recomiendo que mires este curso de la Dra. Miriam Al Adib… ¡Uno de nuestros imprescindibles en Escuela CYCLO!
Ahora que ya sabes todos los trucos para evitar la candidiasis en verano… ¡Solo te queda irte a la playa sin preocupaciones!
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