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Productos de higiene menstrual tóxicos: compresas y tampones
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Mi experiencia con los tóxicos de los productos de higiene femenina
Cuando empecé a menstruar con 12 años, ni me planteé que los productos menstruales pudieran ser malos para mi salud. Simplemente empecé con las compresas que veía en la tele…y poco después con los tampones que sacaban las famosas en la televisión.
Al mismo tiempo empecé a sufrir picores, las ingles se me ponían rojas al roce con la compresas y mi piel tenía muchísimas reacciones alérgicas que ningún médico supo explicarme.
Con 16 años llegué a pasar por urgencias un par de veces con reacciones alérgicas fortísimas y partes de mi cuerpo muy muy hinchadas. ¿Sabes cuántas veces me preguntaron qué productos de higiene femenina usaba? Ninguna.
La presencia de tóxicos en los productos de higiene femenina es un tema que hasta hace apenas muy pocos años, con el despunte de internet y redes sociales, nadie se había planteado. En las cajas de tampones se puede ver en pequeñito los riesgos que implica su uso, como por ejemplo el Síndrome del Shock Tóxico (SST), pero muy pocas veces nos hemos parado a preguntar si había además otros problemas por su uso o si los tampones son tóxicos.
En mi caso personal, no fue hasta los 22 años, es decir, 10 años después de mi primera menstruación, que descubrí que los tampones y compresas tradicionales me daban alergia. ¿Sabes cómo? Porque empecé a usar la copa menstrual y mi cuerpo volvió a la normalidad. No más picores, no más habones en la piel, no más visitas a urgencias con partes de mi cuerpo hinchadas.
Aún recuerdo el momento en el que fui a la ginecóloga emocionada contándole mi descubrimiento, diciéndole que gracias a la copa menstrual había desaparecido mi candidiasis recurrente y mis infecciones y hongos. ¿Su respuesta? Que no le gustaba la copa y que no se fiaba (aunque no la usaba).
¿Qué podemos aprender de esta experiencia? Que es importante escuchar al cuerpo y probar alternativas. Yo sabía que había algo que estaba mal, que no era normal el malestar que sufría cada vez que menstruaba…pero por desgracia no tenía información en mi poder para saber que la causa de mi malestar podrían ser los productos de higiene íntima que usaba, que para mí, resultaban tóxicos.
¿Tienen los tampones y las compresas productos tóxicos?
¿Quiere decir mi experiencia que todos los tampones y compresas son tóxicos? Por supuesto que no. De hecho, cada vez más las empresas se esfuerzan por ofrecer mejores alternativas. Sin embargo podemos seguir observando que algunas compresas están fabricadas con materiales plásticos, y que pese a decir en sus eslóganes que parecen algodón no contienen tal, si no que lo más natural que hay en su composición es la celulosa.
Es muy importante entender que nuestra vulva protege la entrada a la vagina y que ahí tenemos tejido mucosos a través del cual se absorben muy rápido ciertas sustancias químicas, y entre ellas, aquellas que pueden resultar tóxicas.
Si pusiésemos un tampón normal en un vaso de agua, podríamos ver cómo en menos de 5 minutos el agua se pone turbia y se llena de pequeñas fibras. Estas fibras tienen muchas posibilidades de quedarse dentro de nuestro cuerpo, y aunque nuestra vagina es maravillosa y se autolimpia, todo lo que contengan estas fibras, estará en constante contacto con una de las zonas más sensibles de nuestro cuerpo.
Por lo tanto, en la medida en la que estos productos se hacen con componentes como la poliolefina, el rayón o el poliéster, productos para cuya producción es necesaria el uso de componentes tóxicos, así como el uso de perfumes en algunas de estas marcas, podemos decir que los tampones y las compresas pueden resultar tóxicos en algunas situaciones o para algunas personas con hipersensibilidad. Además, leyendo las páginas donde informan sobre sus componentes, la información es muy vaga e imprecisa.
Algo que sí que está claro es el riesgo de Síndrome del Shock Tóxico (SST) que conlleva el uso de tampones. Es muy necesario entender muy bien el riesgo de usar tampones, y en este caso da igual si usamos tampones normales o de algodón ecológico, el riesgo es igual. En este artículo te explicamos a fondo todo lo que debes saber sobre el riesgo asociado al uso de tampones. Solo quiero recordarte una cosa; da igual que lo lleves puesto tan solo 30 min, el riesgo es el mismo que llevarlo 8 horas.
¿Qué estudios hay?
Desgraciadamente no hay muchos estudios independientes que investiguen la presencia de tóxicos en tampones y compresas. Sin embargo, algunos estudios han encontrado trazas de sustancias tóxicas como dioxinas, pesticidas y residuos de herbicidas en productos de higiene femenina, aunque en niveles muy bajos y dentro de los límites de seguridad establecidos por las autoridades sanitarias.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) y otras organizaciones reguladoras han realizado evaluaciones sobre la seguridad de los productos de higiene femenina y han concluido que, en general, no representan un riesgo significativo para la salud de las mujeres cuando se usan según las instrucciones.
Ahora bien, es interesante entender quién elige estos estándares y cómo afecta a cada usuaria de manera individual.
Por otro lado, no hay ningún estudio actualizado que haya podido verificar que las compresas y tampones actuales tienen tóxicos en cantidades alarmantes o altamente preocupantes para la salud, por lo que tampoco conviene alarmarnos.
¿Alternativas? Sí, la copa menstrual y mucho más
Si quieres buscar alternativas a las compresas y tampones tradicionales porque quieres reducir al máximo tu exposición a este tipo de tóxicos existen otras opciones.
La copa menstrual es por excelencia la alternativa más saludable por dos razones principales:
- No deja fibras ni residuos dentro del cuerpo
- Está fabricada con silicona médica biocompatible
Así mismo la copa menstrual no absorbe la sangre si no que la recoge, por lo que no altera el ph de la piel.
Además de la copa menstrual también puedes usar otras opciones como:
- Compresas de tela: fabricadas con algodón ecológico y sin tintes de cara al cuerpo. Son de algodón, algodón. Una opción perfecta para vulvas que han sufrido mucho y que necesitan, literalmente, un respiro
- Compresas y tampones de algodón ecológico: entre sus principales características están sus materiales de alta calidad, fabricadas sólo con algodón y sin geles superabsorbentes o perfumes. Además suelen ser biodegradables porque en lugar de envoltorios de plástico y aplicadores de plástico usan materiales derivados del maíz por ejemplo.
¿Cómo nos pueden afectar los tóxicos de los productos menstruales?
Es muy importante tener en cuenta cada situación, pero si tú en general eres muy sensible a la presencia de tóxicos en el ambiente o tienes reacciones alérgicas en la piel con facilidad y a veces sin causa aparente, sería interesante probar otro tipo de productos menstruales para comprobar si te están afectando de alguna manera los tóxicos de los productos menstruales que utilizas.
A veces puedes padecer síntomas incluso cuando no estás menstruando, debido a la sensibilidad adquirida en tu cuerpo tras el uso continuado de estos productos. Imagínate, menstruamos durante unos 40 años a lo largo de nuestra vida, una semana aproximadamente al mes…la exposición a estos componentes tóxicos puede ser muy alta.
Posibles enfermedades
Aparte del SST arriba mencionado, no podemos hablar de enfermedades directamente relacionadas con el uso de tampones y compresas. Ahora bien, su uso sí que puede agravar situaciones pre-existentes como:
- Erupciones cutáneas
- Hongos
- Candidiasis
- Infecciones vulvo-vaginales
Lo más recomendable es que consultes con tu ginecólogo/a en cualquiera de estas situaciones y le preguntes qué tipo de productos de higiene femenina te recomienda o cuánto tiempo debes esperar hasta volver a utilizar algunos como los tampones o incluso la copa.
Síntomas a los cuales hay que estar alerta
En cualquier caso, si cuando menstrúas sientes picor en tu vulva, se te pone la zona enrojecida, la piel sensible, huele mal (no a sangre menstrual, si no un olor fuera de lo habitual) o sufres incluso dolores de cabeza, es conveniente que revises el producto menstrual que utilices.
Sin haber estudios que lo relacionen directamente, son muchas las mujeres que declaran por ejemplo, que ponerse un tampón les produce dolor de cabeza. Y que en cuanto han cambiado a compresas o copa menstrual, este dolor tan específico desaparece.
Una vez más, es importante escuchar al cuerpo y no normalizar el malestar o el dolor.
No solo contamina tu cuerpo, también el medio ambiente
Y ya para acabar, me gustaría reflexionar sobre el daño que los tóxicos de compresas y tampones hacen en el medio ambiente, y no solo en nuestro cuerpo.
Las compresas y tampones normales, en cuya fabricación se emplean plásticos, no son biodegradables. Y esto es un serio problema para el medio ambiente. Considerando que la mitad de la población menstrúa durante unos 40 años, imagínate el impacto que tiene el producto menstrual que utilices.
Y además, ¿quién no se ha encontrado una compresa o tampón en la montaña o en la playa?
Por eso es importante tomar decisiones teniendo en cuenta el impacto medioambiental de nuestra menstruación. Recuerda que frente a una compresa o un tampón que no son biodegradables y que se usan durante máximo 8 horas, hay alternativas como la copa menstrual, que puede durar hasta 10 años.
Además es importante entender que los contaminantes que sin querer nos ponemos en nuestro cuerpo, al final van al medio ambiente a través de nuestra orina, el agua de la ducha etc etc. Por lo que cualquier decisión personal tiene un impacto en el medio ambiente.
Espero que este artículo te ayude a tomar mejores decisiones respecto a los productos que usas y a recordarte que nadie mejor que tú para saber si hay algo en tu cuerpo que está bien.
Gracias por leerme,
Paloma