¿Pasado, presente, futuro? Nuestra historia va mucho más allá de esa fórmula. Tú, que menstruas, tienes una serie de ritmos internos que inevitablemente “se repiten” mes tras mes. Tus hormonas, las que hacen que tu ciclo funcione correctamente, van fluctuando a lo largo del tiempo y te regalan diferentes sensaciones.
Eso no quiere decir que tu personalidad cambie. Ni que seas una persona diferente cada día. Solo que, dependiendo de tus alteraciones hormonales, estarás más condicionada a sentir determinadas emociones y sensaciones.
Por eso, te invito a que descubras cuáles son esos “patrones” y esa guía de emociones por las que transitas. Tu historia, o así lo veo yo, está marcada por un hilo conductor invisible: tu ciclo. Tu cuerpo, ese lugar donde habitas, se mueve en círculos gracias a todas las hormonas que intervienen en tu ciclo menstrual.
Conocer cómo es tu ciclo menstrual te va abrir un mundo nuevo. Y no, no estoy exagerando: a mí misma me ha cambiado. El autoconocimiento sobre tus emociones y sensaciones te hace capaz de prever si esta semana vas a tener más energía o si necesitarás una dosis extra de autocuidado.
Descubrir cómo es tu ciclo menstrual también te permitirá saber qué días son mejores para socializar, empatizar con tu familia o acabar con todas las tareas pendientes en el trabajo. O incluso te dará el poder de saber qué días son más fértiles si lo que deseas es quedarte embarazada. Te regalará saber por qué hoy te sientes una Diosa del Olympo o el motivo oculto detrás de esa sensibilidad especial con la que observas el mundo.
Pero para saber todo eso, mi recomendación es que escribas. Que anotes, dibujes, registres cada detalle… Al menos durante 5 minutos cada día. Cuando lleves unos tres ciclos empezarás a descubrir que ¡hay similitudes! Que el día 5 del ciclo sentiste más o menos lo mismo que el día 5 del siguiente ciclo. Y voilà. Habrás empezado el camino hacia el autoconocimiento de tu ciclo.
Eres tú la que tiene el poder. Pero hay unas sustancias químicas que ayudan bastante. Si no las conoces, te las presento: la progesterona y el estrógeno. En tu ciclo menstrual siempre habrán niveles de progesterona y estrógenos. Pero, empezarán a predominar o disminuir unos y otros dependiendo de la fase que transitemos, ¿te vienes a verlos?
Tu ciclo empieza el primer día de sangrado. Es decir: que el primer día de menstruación significativa (más allá de unas manchitas) será el primer día del ciclo. Entraremos además en la fase folicular: en tu ovario empezarán a desarrollarse los folículos predominantes. Más tarde, uno de esos folículos se desprenderá para provocar la ovulación.
En esta fase, que abarca la menstruación y la preovulación, los niveles de estrógenos empezarán a subir lentamente, hasta que se produzca el pico más alto en el momento de la ovulación. Los estrógenos nos regalarán mucha energía, sensación de vitalidad, ganas de socializar y de sentirnos abiertas al mundo.
En la fase lútea podemos encontrar las dos últimas etapas del ciclo menstrual: la ovulación y la premenstruación. La fase ovulatoria sirve como “puente” entre la fase lútea y la folicular: el estrógeno alcanza su punto más alto para producir el desprendimiento del folículo y preparar al endometrio para que se vuelva más denso y se prepare para la fecundación.
Si no se produce el embarazo, los niveles de estrógenos se estabilizan. Al mismo tiempo, empieza a predominar la progesterona, y lo hará hasta el final del ciclo.
Como predomina la progesterona (hormona encargada de proteger en óvulo si este ha sido fecundado) es normal que sintamos mayor sensibilidad en los pechos o momentos de menos energía. Pero no quiero hablar de esta fase en negativo, ¡porque no lo es en absoluto! Es una etapa muy infravalorada, y nos regala muchísimas cosas buenas como mayor creatividad, intuición y conexión con nuestras verdades más profundas.
Todas estas alteraciones hormonales influyen significativamente en todo lo que nos pasa: seguramente no recibirás igual una misma noticia si estás menstruando que si estás ovulando. O no hagas de la misma forma una entrevista de trabajo si estás en fase premenstrual que si se produce cuando estás en fase en preovulatoria.
Y ahí reside la magia: aunque lo que te he contado es lo que “suele” suceder, no tengo ni idea de cómo es tu ciclo menstrual. Cada persona menstruante es única y tú tienes el poder de descubrir cuál es tu forma única de ser en cada fase de tu ciclo.
Seguramente te estés preguntando cómo empezar. Te lo advierto: autoconocerse es altamente contagioso. Puede que un día te sorprendas analizando que si hoy has llorado es porque es el día 15 de tu ciclo, y siempre te pasa. O que canceles un plan “porque hoy estás premenstrual y necesitas un poco de espacio”.
Eso sí: te requerirá un poco de tiempo. ¿Cuánto? 5 minutos al día para escribir mis sensaciones. Mi truco para no fallar a la cita es hacerlo bonito: me preparo algo caliente (suele ser una infusión) después de la ducha. Me pongo mi playlist favorita de fondo, y si me quedan, enciendo una vela. Como si fuera la protagonista de una película… porque en el fondo, de eso se trata, ¿no?
Para registrar tu ciclo menstrual lo primero que necesitas (y muy importante), es reservar un cuaderno, libro, diario para ello. Es importante que sea exclusivamente para ese fin, ya que de esa forma podrás consultar lo que escribes sin “listas de la compra” por en medio.
¡Mi opción preferida! Los diarios, además de románticos, son geniales para hacer un seguimiento rutinario de las cosas que nos suceden. No solo te servirá para registrar tu ciclo, sino para encender “esa vocecilla” narradora que tienes en tu interior. Es un ejercicio terapeútico buenísimo si tienes la sensación de que no te ocurren cosas significativas en tu día a día. Verás como poco a poco, empezarás a darle importancia en los detalles. En ellos está el verdadero autoconocimiento.
En CYCLO, hemos diseñado un diario especialmente ADAPTADO al registro de tu ciclo… ¿Quieres descubrirlo?
Diario para registrar y conocer cómo eres en cada una de las fases de tu ciclo menstrual.
Si eres de las que necesitan verlo todo “a un golpe de vista” el diagrama circular será tu opción preferida. Solo tienes que escribir (o dibujar) tus sensaciones del día en pequeños gajos que irás completando a lo largo de tu ciclo. Si quieres saber más sobre esta opción, te dejo aquí un post en el que hablamos detalladamente sobre cómo hacerlo.
En el diario CYCLO también hemos incluido los diagramas circulares para que puedas disfrutar de ambas opciones.
¿Eres una artista del dibujo?, ¿lo tuyo es más “vale más una imagen que mil palabras”? Puedes darle a tu imaginación y marcarte un collage, un cuadro, sobre cómo te sientes a lo largo de tu ciclo.
Solo necesitarás hojas en blanco, tijeras, pinceles… ¡Y a ti misma!
¿Y por qué escribir a mano en lugar de una app? Pues a parte de que no le estás regalando tu información a ninguna plataforma, creo que es un ejercicio que puede ayudarte a establecer una conexión más profunda con lo que de verdad sientes. Además, las pantallas nos desconectan de nosotras mismas, por lo que es una oportunidad perfecta para regalarte una conexión real contigo misma y tus pensamientos. Sin notificaciones ni distracciones.
En lugar de apretar un botón, tienes una infinidad de registros y opciones en las que solo tú tendrás el poder.
Escribir a mano te permitirá activar esa parte del cerebro dedicada a la imaginación y al subconsciente, por lo que hará que tus reflexiones sean mucho más puras. Te acercarás mucho más a “la idea de ti”.
Ve a lo sencillo y acertarás seguro. No necesitas cargadores, ni conexión a internet. Una práctica que no te exigirá nada más que a ti misma.
Hacer un seguimiento de tu ciclo sin distracciones, ni mensajes intrusivos, me parece como mínimo relajante. Es un momento para ti, así que tómatelo como un momento detox del mundo multipantalla.
En CYCLO llevamos mucho tiempo buscando la herramienta perfecta para registrar nuestro ciclo, y llegados a este punto… ¡La hemos creado!
¿Un diario para registrar mi ciclo? Sí. Como lo lees. Un diario precioso con 365 hojas en blanco para que apuntes tus sensaciones, emociones y características de cada día de tu ciclo, que como hemos visto antes, empieza el primer día de sangrado significativo.
Además, es un diario sin fechas. ¿Por qué? Pues para que seas tú la que decida cuántas páginas quieres escribir al día (para esos días en las que estás mega inspirada). También tienes una línea justo abajo de la fecha, para que escribas exactamente en qué día de tu ciclo estás. Así será más fácil encontrar “similitudes” con otros ciclos y empezar a observar tus propios patrones.
¡Ah! Y algo súper guay: tienes un tracker en la parte inferior para “nivelar” tus objetivos. Por ejemplo, si lo que deseas es ver cómo es tu productividad, tu sueño y tu energía a lo largo de tu ciclo puedes incluirlo en el espacio que te dejamos. Solo tendrás que ir rellenando los “circulitos” para observar cómo van evolucionando.
Ya te lo he adelantado, pero una de las cosas más importantes del Diario CYCLO es que ¡incluye diagramas circulares! Para nosotras es imprescindible que puedas utilizar esta otra forma de registrar tu ciclo, que además puede ser complementaria al formato más clásico. Tendrás a tu entera disposición 13 diagramas menstruales para que veas a simple vista el resumen de todos tus ciclos.
Para que no tengas ninguna duda sobre cómo utilizarlo, con el Diario CYCLO tendrás acceso al taller “Aprende a registrar tu ciclo menstrual”, online y a tu ritmo. Y por si fuera poco… 5 postales de afirmaciones cíclicas para llevar tu autodescubrimiento a todas partes.
¡Sí! Es una muy buena idea. Aunque no “tengas la menstruación” durante esos nueve meses, tu cuerpo sin duda pasa por muchos y diferentes ciclos. Puede servirte para gestionar cómo cambia tu cuerpo y puede ser tu mini-manual para cualquier pequeña cosa que quieras consultar a tu ginecólogo.
La luna siempre se ha asociado con nuestra naturaleza cíclica. De hecho, ¿sabías que nuestro cuerpo está compuesto por una media del 65% de agua? Y ya sabes, la luna mueve las mareas.
Aún así, esto es algo completamente voluntario. Hay mujeres que no se sienten identificadas con esto, y es completamente a gusto de cada persona. ¡Qué bien que podamos elegir nuestra propia visión!
Además hay otras similitudes como las cuatro fases por las que transitamos. A mí, particularmente, me ayuda mucho a conectar con esas energías. Por ejemplo, tradicionalmente se asociaba la fase menstrual con la luna nueva y la ovulatoria con la luna llena. Y, si lo piensas, tiene una simbología brutal.
¡Sí! Puede ayudarte a calcular tus días fértiles si quieres quedarte embarazada o si por el contrario utilizas métodos anticonceptivos naturales. Por eso, utilizar un diario menstrual para registrar -y saber exactamente cuándo estás ovulando- es genial para llevar un control de tus días fértiles.
Las cosas que necesitas saber para apuntar e identificar tus días fértiles en el calendario son las siguientes (¡apúntalas en tu diario ahora mismo!):
Para empezar a utilizar tu diario menstrual solo tienes que hacer una cosa: dedicarte al menos 5 minutos al día para ti. Para registrar tus síntomas, tus emociones y sensaciones. Te explico cómo puedes ir pasito a pasito:
Una vez aprendas a saber cuándo estás transitando por estas 4 fases, aprenderás a saber cómo es tu propio ciclo. Estarás más cerca de saber cómo cuidarte, cómo planificar tu vida de acuerdo a eso y qué puedes esperar de cada etapa.
Conocer tu ciclo te abrirá muchas puertas, pero sobre todo una muy especial: la de descubrirte a ti misma. Espero que este camino te ayude a entenderte… ¡Si estás leyendo esto, es porque ya has dado el primer paso!
Be a #TabooBreaker